Este blog ha estado muerto todo 2014, y ahora que lo he resucitado, me voy encontrando (por Facebook, por el correo electrónico) textos que escribí el año pasado tales como este:
Tras los enfrentamientos al término de la manifestación del 22M (quien
quiera saber "de qué parte" estoy, que mire mi muro), tengo que decir
algo, y lo hago aquí para empezar aunque no descarto resucitar el blog:
No seáis tan estúpidos de regalar un policía muerto al sistema. Lo
están deseando. Os lo pusieron en bandeja el otro día y casi lo
consiguen. Quieren mártires para legitimarse de cara a la opinión pública. ¿Se los vais a dar por ser los héroes entre vuestros amigotes?
He detectado entre la gente de fuera incluso añoranza de ETA. Yo
también siento rabia contra el Gobierno y el compadreo dominante en
general, pero, ¿no habéis aprendido nada?
¿Sabéis cuántos guardias
civiles del cuartel de Intxaurrondo murieron a manos de ETA, sobre todo
en los 80? 200 agentes. Y el cuartel sigue ahí. Para que os hagáis una
idea de que siempre tienen de repuesto y, además, los ponen para eso: os
entretenéis peleando con ellos y sus amos mientras tanto observan
complacidos.
No se trata de poner la otra mejilla, pero tampoco de
golpearles con señales de tráfico cuando están en retirada ni de
lapidarlos cuando son un grupito que no representa ninguna amenaza.
Y
a los secretas que os infiltráis para provocar disturbios y luego
decís: "¡Soy compañero!", os digo: vaya mierda de compañeros. Miembros
de la policía: tenéis enemigos más peligrosos (para vuestra seguridad)
dentro del cuerpo y por encima que enfrente.
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